Viviendo Por La Gran Misericordia

Escrito el 10/09/2019
Pastor César Jiménez

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Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. (Lamentaciones 3:22-23)

Texto Bíblico: (Lamentaciones 3:21-27)

Creo que la razón más por la que los israelitas conquistaron la tierra prometida fue por la misericordia del Señor. Sin embargo, mal haríamos en pensar que su misericordia solo alcanzó para ese momento. Puesto que la historia del ser humano ha seguido a través de los tiempos, siempre ha necesitado de la misericordia del Señor, así que, una vez más hoy debemos recordar que la razón por la que podemos ser vencedores en las luchas, temores y desafíos es la fidelidad de nuestro Dios. Eso es lo que nos mantiene con fe en sus promesas.

Jeremías expreso este profundo sentimiento en medio de una gran necesidad de aflicción y abatimiento que trajeron amargura a su alma, pero pronto reaccionó con el poder de la Palabra del Señor.

“Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré”

Es solo gracias a las misericordias del Señor que no somos consumidos. Misericordia significa la compasión del Señor y no juzgarnos por lo que merecemos. Podemos vivir todos los días por la bendición de Dios, pero no podriamos esperar algo nuevo si su misericordia no es nueva, esto es lo que debemos recapacitar en el corazón con una gran sinceridad. Ninguna persona podría usar todos los días la misma ropoa y decir que es nueva, ni subir a su automovil y decir lo mismo, esto es porque todas las cosas, incluyendo nuestra persona van sufriendo un desgaste natural día con día.

“Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”

El secreto de la bendición de Dios en cada detalle de nuestra vida es que su misericordia es nueva cada mañana.

La misericordía es uno de los atributos de Dios que perdona nuestras debilidades. Pero la misericordia del Señor se basa en su compasión.

¿Qué es la compasión? La compasión es el acto de sentir la necesidad del ser humano desamparado

“Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas”

Pero aunque los días han sido malos, su fidelidad es grande.

Su misericordia nunca disminuye;

“si somos infieles, el permanece fiel”

Así que reflexionemos como el profeta

“Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré”.

Escojamos esa porción porque Jehová es bueno con los que esperan con paciencia.