La conversión de Saulo



Lección 10

Hechos

Texto base: Hechos 9


 

Un Acercamiento a la Lección

Es claro que Dios uso la muerte de Esteban para lanzar a la iglesia hacia el cumplimiento de la segunda fase de la misión; llevar el evangelio a Judea y Samaria. Esteban dio su vida por causa de la predicación del evangelio, Dios lo permitió y uso ese hecho para su gloria y el esparcimiento del reino a pesar de la oposición. La lapidación de este mártir fue el primer acto de una gran persecución que se desata contra la iglesia judía en Jerusalén, y que resultaría en el esparcimiento de la iglesia (judío-griega) por todo el imperio. Estos judíos de habla griega al ser expulsados por la persecución en Jerusalén, llevan el evangelio de Jesucristo a todos los lugares a donde van.

Con la conversión de Saulo de Tarso, Lucas cierra su reporte sobre el progreso de la misión de la iglesia en los territorios de Judea y Samaria, la cual constituye la segunda fase. La experiencia de Pablo en el camino a Damasco es clave para el resto del contenido del libro, y por ende, para la tercera fase de la misión, en dos formas.

Primera:

En el sentido en el que este evento nos presenta al hombre (Saulo) que a partir del capítulo 11 representará la misión de la iglesia al mundo gentil en general, o como lo expresa la gran comisión:

"...hasta lo último de la tierra."

Recordemos que la primera fase fue totalmente enfocada al pueblo de Israel desde Jerusalén. En la segunda fase la predicación del evangelio se extiende a Judea y Samaria. Aunque el enfoque deja de ser exclusivamente judío ya que los samaritanos eran mitad judíos y mitad gentiles (mestizos), sin embargo todavía notamos en los hermanos que han salido de Jerusalén con la misión, cierta tendencia a evangelizar solamente a los judíos griegos y hebreos (11:19). Pero a partir de Pablo, la misión se vuelve totalmente gentil, sin olvidar a los judíos por supuesto.

 

La segunda:

La razón por la que la conversión de Saulo es clave para el resto del libro es porque ilustra el poder, el contenido, y el propósito del evangelio de Jesucristo. Observemos, veamos, y maravillémonos del poder de Dios expresado en el evangelio que vivimos y anunciamos al mundo. De la noche a la mañana un hombre fiero y desalmado que respira odio, amenazas y muerte, dispuesto a quebrar los huesos, y desgarrar la carne de todo judío que abandonando su religión se volvía a Jesús, es quebrado hasta el polvo de la tierra, confundido en su sabiduría y soberbia, levantado del polvo y la ceguera, y transformado, equipado, y hecho predicador del evangelio que unas cuantas horas antes asolaba y juraba destruir.

¿Quién es capaz de hacer todo esto? ¡Sólo Cristo por medio de su evangelio!

Con esto en mente, la iglesia en los días en que Lucas escribe el libro necesitaba recordar de qué estaba hecho el evangelio que anunciaba. Nosotros, la iglesia de este tiempo en la Ciudad  de México, necesitamos ser reconfortados por el poder del Espíritu de Dios manifestado en su evangelio.

 

1. El Evangelio de Jesucristo Confronta al Hombre con Dios (9:1-9).

El hombre es confrontado en su auto concepto de Dios. El concepto que Pablo tenía de Dios era el concepto religioso. Es decir, un Dios impersonal que se relaciona con su gente a través de reglas externas, más interesado en la sujeción litúrgica que en el corazón; un Dios que es Dios de Israel, y juez de los gentiles. Saulo no conocía a Dios, así lo confiesa en (Fil.3:3-10).

En su concepto de la vida. Saulo poseía su propio concepto de la vida que en (Fil.3:9) llama “mi propia justicia” Esto lo hace sentirse en paz con Dios cunado realmente se encuentra caminando en sentido contrario. Es enemigo de Dios pero se cree amigo. Persigue a Dios y cree que le sirve. Se dirige a Damasco con prisión, odio y muerte en su corazón, cuando el plan de Dios para Damasco es el de la salvación en Cristo.

En su concepto de sí mismo. Saulo tenía un altísimo concepto de sí mismo, a tal grado que se consideraba autosuficiente, e intocable;

"Si alguno piensa que tiene de confiar en la carne, yo más: circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos, fariseo, en cuanto a la justicia de la ley, irreprensible..."

Seguramente Saulo se dirigía a Damasco en un caballo de alzada y aspecto impresionante que hacía juego con lo que creía de sí mismo, y de la misión que llevaba. El Señor le sale al encuentro, le dirige una palabra, y Saulo queda expuesto tal cual es: tirado en el polvo de la tierra, ciego, y en total confusión. Todo su mundo, su concepto de Dios, de sí mismo, de la vida queda reducido a polvo y oscuridad. Y así lo deja Dios por tres días antes de extender su mano sobre él.

En su necesidad de Dios. A pesar de todo, es inspirador notar que Saulo se mantiene sensible a la voz de Dios. Cuando el Señor le pregunta,

"¿Por qué me persigues?" (vr.4) él inmediatamente sabe que la voz es divina porque contesta, '"¿Quién eres Señor?" El "Señor" aquí es el título de la divinidad que se usa para Dios, una vez que es confrontado con su forma equivocada de vivir, vuelve a manifestar su sensibilidad, "Señor, ¿qué quieres que yo haga?" Ante tal quebrantamiento y humildad, Jesucristo por medio de su evangelio provee la respuesta:

  • Levántate
  • Entra en la ciudad
  • Allí se te dirá lo que debes hacer

 

 

2. El Evangelio de Jesucristo Une al Hombre a la Familia de Dios que es la Iglesia (9:11, 12, 17, 19, 25, 26,30)

 

La iglesia de Cristo es el único cuerpo que Dios tiene aquí sobre la tierra para predicar el evangelio. Es entonces natural que cuando una persona se reconcilia con Dios, busque inmediatamente relacionarse con el cuerpo de Cristo para edificarse, crecer, y servir en su comunión.

Una vez que Dios trata con el hombre confrontándolo en los fundamentos mismos de su vida, él toma la iniciativa para integrarlo a! cuerpo de Cristo que es su iglesia. En el caso de Saulo, Dios espera tres días, y cuando la soledad, el ayuno, y la oscuridad de la ceguera han logrado el impacto planeado en la vida de Saulo, Dios usa un miembro de la iglesia local como instrumento de bendición. Ananías es enviado a Saulo para guiarlo a los pies de Cristo, bautizarlo en agua, orar por él para el bautismo con el Espíritu Santo, y sanidad. Pero de una manera muy especial Ananías representa al cuerpo de Cristo en Damasco que abre sus brazos y su corazón para recibir e integrar en su seno a este enemigo convertido en hermano y miembro:

"Hermano Saulo, el Señor Jesús... me ha enviado..." (vr.17)

Después de reconciliarse con Dios reconociendo a Jesús como el Mesías, y como su Salvador y Señor, y haber recibido el toque transformador y restaurador de Dios, lo primero que Saulo hace es integrarse a La expresión local de la iglesia de Cristo en Damasco. Como miembro de esta iglesia Saulo comienza a predicar a Cristo a los judíos en las sinagogas de aquel lugar. Tan extraordinario e impactante es el testimonio de Saulo para los judíos que lo conocían que no lo pueden soportar, y deciden matarlo. La iglesia lo rescata, y lo envía de regreso a Jerusalén.

En Jerusalén Saulo es todavía más conocido, y disfruta de una gran reputación por su erudición.

Recibió su educación básica, y universitaria en su ciudad natal, Tarso de Cilicia que era un centro universitario de la cultura griega.

Había venido a Jerusalén para doctorarse a los pies del académico más renombrado de su tiempo, el Doctor Gamaliel; empresa que logró con honores. Pero en Jerusalén Saulo es reconocido también por su celo de las tradiciones de los padres, y por su impecabilidad en la observancia de la ley.

A esta situación Saulo regresa predicando a Jesús como el Mesías de Dios, apenas unos días después de que había sido comisionado por el Alto Mando Religioso de Israel como el exterminador de la iglesia de Jesús. Sin embargo Saulo regresa a Jerusalén, y sin ningún titubeo ante la Inmensa presión de esta situación, se identifica plenamente con la iglesia local, y comienza a predicarles a sus antiguos correligionarios. En Jerusalén el asombro, el estupor entre los judíos es mayor, y la decisión es la misma que en Damasco, cortar de la tierra a tal hombre.

La iglesia en Jerusalén lo rescata, y lo envía a los hermanos en Cesarea del mar, y de allí a la iglesia en su ciudad natal, Tarso de Cilicia. Pero en todo momento, y en cada fase de este proceso vemos a Saulo totalmente integrado, y sujeto al cuerpo de Cristo en el lugar donde se encuentra. Esta integración y participación es característica de la obra genuina de Cristo y de su Espíritu en la vida del nuevo creyente, por la predicación del evangelio.

 

3. El Evangelio de Cristo Equipa al hombre para la Obra del Ministerio en cualquiera de las Fases de su Llamamiento (9:15-18)

  • Lo reconcilia con Dios por medio de Jesucristo.
  • Lo restaura.
  • Lo bautiza en agua.
  • Lo llama a ocupar su lugar en la misión de la iglesia al mundo.
  • Es bautizado con el Espíritu Santo.

 

 

Conclusión:

La conversión de Saulo (Pablo) al evangelio de Jesucristo, aportó al avance de la misión de la iglesia una nueva dimensión, el evangelio a partir de este capítulo comienza a dar grandes avances entre el mundo gentil, él Señor inicia una gran extensión de la iglesia en todo Asía y Europa. Los milagros y las señales acompañaron la predicación del evangelio por medio de Pablo (el instrumento escogido) ¿Cómo responderemos al Señor cuando el se manifieste a nuestra vida?