Solo Recuerda



¡Pero no les tengas miedo! Solo recuerda lo que el Señor tu Dios le hizo al faraón y a toda la tierra de Egipto. 

Deuteronomio 7:18

Por eso les digo que no se preocupen por la vida diaria, si tendrán suficiente alimento y bebida, o suficiente ropa para vestirse. ¿Acaso no es la vida más que la comida y el cuerpo más que la ropa? Miren los pájaros. No plantan ni cosechan ni guardan comida en graneros, porque el Padre celestial los alimenta. ¿Y no son ustedes para él mucho más valiosos que ellos? ¿Acaso con todas sus preocupaciones pueden añadir un solo momento a su vida? ¿Y porqué preocuparse por la ropa? Miren cómo crecen los lirios del campo. No trabajan ni cosen su ropa; sin embargo, ni Salomón con toda su gloria se vistió tan hermoso como ellos. Si Dios cuida de manera tan maravillosa a las flores silvestres que hoy están y mañana se echan al fuego, tengan por seguro que cuidará de ustedes ¿Por qué tienen tan poca fe? 

Así que no se preocupen por todo eso diciendo: “¿Qué comeremos?, ¿qué beberemos?, ¿qué ropa nos pondremos? Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades. Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten. Así que no se preocupen por el mañana, porque el día de mañana traerá sus propias preocupaciones. Los problemas del día de hoy son suficientes por hoy. 

Mateo 6:25-34 (NTV)

Fernando perdió su trabajo. Otra vez. 

Por tercera vez en siete años, Fernando se encontraba experimentando de nuevo el desempleo. Las viejas ansiedades para pagar sus cuentas comenzaron a levantarse. ¿Cómo iba a alimentar a su familia? ¿Perderían su casa? 

Pero esta vez, Fernando se detuvo para recordar. Y con cada memoria de aquellas experiencias pasadas, sus temores fueron remplazados por una firme confianza en la fidelidad de Dios. 

La primera vez que perdió su empleo, Fernando estaba devastado y sentía que su vida entera se vendría abajo. Él y su esposa se vieron forzados a vender su casa. Fue una dura pérdida, pero mirando hacia atrás, el recordó que nunca se quedaron sin comida ni sin una casa donde habitar porque Dios proveyó por medio de la generosidad de otros. 

La segunda vez también estuvo en aprietos, especialmente porque él tuvo que tomar un trabajo que no era ni la mitad de bueno que el anterior. No fue fácil, y de nuevo su familia tuvo que hacer recortes en sus gastos haciendo que todo fuera más difícil e incomodo. Pero aún así Dios proveyó para sus necesidades. 

Recordando la fidelidad de Dios en el pasado pon tu situación presente bajo esa perspectiva. 

Si estás experimentando incertidumbre, seguramente vendrán algunos desafíos que deberás enfrentar. Pero en vez de permitir que el temor te quite el gozo y la paz, confía, y conéctate con el Constructor de confianza y alegría en las formas en las que Dios está accesible para ti. 

Reflexión y oración: 

  • ¿Puedes recordar alguna situación de incertidumbre en el pasado cuando llegaste a pensar que no lo lograrías? ¿Cómo experimentaste la fidelidad de Dios en ese momento?
  • No solo recuerdes la fidelidad de Dios, comparte de ella cada vez que tengas oportunidad. Cuéntale a las personas que conoces cómo Dios ha manifestado su fidelidad hacia ti.  
  • Pide en oración al Padre celestial que dirija tus pensamientos para que recuerdes sus palabras, su amor, su poder, y su fidelidad en medio de este tiempo de prueba. Y remplace todo temor o angustia por una confianza nueva en sus promesas.