Hubo una vez, hace miles de años un hombre muy poderoso. Vivía en un gran palacio, con oro, joyas y millones de esclavos. Pero un día, cosas horribles empezaron a suceder.

 

Todo empezó el día que un hombre andrajoso entró en el palacio y reveló su verdadera identidad: aquel hombre de vestidos humildes años atrás había vivido en ese palacio, pero al intentar hacer justicia para un esclavo extranjero mato a un hombre y huyó al desierto. 

 

Pero ahí estaba de nuevo, y ahora llegaba con un extraño mensaje. Pedía la liberación de todos los esclavos. Al ser su petición negada. Plagas terribles empezaron a consumir el país. Hubo hambre, destruccion y con la última plaga: muerte. 

 

¿Te suena la historia? 

 

Faraón era el hombre más poderoso sobre la tierra en ese momento. Pero no era más poderoso que Dios. Las plagas lo demostraron. Y la última plaga lo hizo aceptarlo.

 

Aquella noche en que pasaría la muerte por todas las calles de Egipto Dios le hablo a Moisés. Debían poner sangre en la entrada de sus casas para que no murieran. 

 

Esa noche, Dios demostró su poder extraordinario, que él tiene el poder sobre la muerte (el decide dónde, cómo y cuándo enviarla) y él tiene el poder de protegerte de ella. 

 

Hace miles de años usaron sangre de corderos para marcar sus casas. Hoy, la sangre de Jesús que cayó cuando murió en una cruz tiene el poder no solo de evitar que entre la muerte, sino de derrotarla-porque él ha sido el único que ha vencido a la muerte y cuando hizo eso volvió a demostrar que no existe nadie más poderoso en el mundo. 

 

Tal vez has tenido miedo a la enfermedad o incluso a la muerte pero hoy recuerda (y recuérdale a tus hijos) que cuando la muerte se pasea por las calles, hay alguien más poderoso que ella y él tiene nuestras vidas en sus manos. 

 

De eso se trata la Pascua (de hecho la palabra significa pasar de largo) los judios la empezaron a celebrar para recordar esa fecha extraordinaria en donde Dios demostró su poder y amor para su pueblo. 

 

Actividad: Noche de película 

Miren juntos la película de Superlibro y platícale qué esa fue la primera Pascua 

 

 

¿Tiene muy poco que ver con conejos y huevos de colores verdad? Pero tiene todo que ver con recordar lo poderoso que es el Dios en quien hemos confiado.

"Te alabaré en la mañana por tu poder y por tu amor. Tú eres el Dios que me protege; tú eres el Dios que me ama." Salmos 59:16